Relato de primavera: La decisión

Título: La decisión

Autora: Concha Pérez Mazo

Apoyada en la barandilla, veía a la gente que montaba en las barcas del estanque, reír y jugar a salpicarse. Gente joven y menos joven, propios de Madrid y ajenos, todos iguales.

Hoy su mirada no era la misma, se sentía vieja, aunque quería vivir, seguramente igual que los demás, ya lo pensó antes, todos iguales.

Había estado pensando en su final y decidió que debía ser bello y especial. Por eso, con la decisión tomada, miró por última vez su amado parque del Retiro y después de descansar por la noche, se puso en camino al amanecer. Ya no le gustaba viajar de noche, cosas de la edad.

Viajó buena parte del día a pesar del cansancio. Tenía que llegar antes de que se ocultara el sol, y lo consiguió. Siempre había sido muy tenaz, fue su mejor adorno, todos lo decían, y.... ¡Aquí estaba! Cumpliendo su sueño, aunque ahora la invadían las dudas, pero no, no lo iba a permitir, y haciendo un esfuerzo, con valentía, esa que pocas veces se había permitido en su vida, se dirigió hacia un banco de la playa y se quedó mirando hacia el infinito.

Repasó su vida y se dio cuenta de los muchos momentos de miedo de los que estaba llena. Siempre había hecho lo que se consideraba correcto marchando con sus semejantes sin plantearse si quería ir o no, si le gustaba el lugar a donde la llevaban o no. Nunca se había arriesgado a marchar sola, siempre estuvo al abrigo del grupo y mucho menos se atrevió a ir contra corriente. Había sido dócil, evitando cualquier confrontación y asumiendo las decisiones de los otros por no desagradarles. Le dolía el dolor de los demás.

Pero ahora, ahora sabía que estaba en el final y pensó que este era un buen momento para hacer algo heroico, algo a lo que nunca se atrevió a pesar de haberlo deseado muchas veces.

¿Qué habría allí? Seguro que era bello porque el horizonte no engañaba y entre el mar y el cielo podría estar el lugar hermoso donde descansar para siempre.

Contenta con su decisión, la vieja paloma elevó el vuelo y se perdió, camino del infinito.

Concha Pérez Mazo

Marzo 2021